Este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, UNI Igualdad de Oportunidades hace campaña para apoyar la salud de las mujeres en el lugar de trabajo.

Cada año, millones de mujeres dejan de trabajar, tienen dificultades en sus puestos de trabajo o se ven impedidas de alcanzar su potencial debido a problemas de salud que afectan principalmente a las mujeres y a las asignadas al nacimiento.    

La nueva campaña pretende concienciar sobre la necesidad de incluir la perspectiva de género en las políticas de seguridad y salud laboral en relación con temas como la salud reproductiva y sexual; la salud de la mujer (cáncer de ovarios, de mama); la salud mental; y el embarazo y las pérdidas, entre otros.

"Las mujeres son esenciales para la mano de obra, pero demasiadas abandonan sus puestos de trabajo por problemas de salud que podrían hacerse mucho más llevaderos mediante políticas flexibles y de apoyo en el lugar de trabajo. Las mujeres sufren en silencio y les resulta demasiado difícil hablar de sus problemas de salud con sus empleadores o colegas. Esto tiene que cambiar", dijo Verónica Fernández Méndez, responsable de UNI Igualdad de Oportunidades.

Según un estudio reciente realizado en el Reino Unido, sólo este año hasta un millón de mujeres podrían verse obligadas a dejar de trabajar por falta de apoyo a la menopausia. Una de cada diez mujeres padece endometriosis, una enfermedad ginecológica debilitante y dolorosa. Una investigación reciente realizada en Australia reveló que una de cada seis mujeres, transexuales o no binarias que padecen esta enfermedad han perdido su empleo debido al impacto de la endometriosis en su trabajo.  

Las mujeres también son más propensas a tener mayores responsabilidades de cuidado, lo que conlleva una carga mental y un estrés adicionales que, a su vez, afectan a su capacidad para realizar su trabajo o incluso para permanecer en él. Estas tensiones se han visto agravadas por la pandemia de Covid-19, lo que ha provocado que las mujeres abandonen el mercado laboral a un ritmo alarmante.  

Covid-19 también destacó el problema de que los equipos de protección personal suelen estar diseñados sólo para el cuerpo de los hombres, lo que hace que sean poco ajustados e ineficaces. En otros casos, las mujeres que trabajan en sectores dominados por las mujeres, como la peluquería y la belleza y la limpieza, están expuestas a productos químicos que provocan problemas de piel y alergias.

"Los sindicatos pueden ayudar a concienciar sobre los problemas de salud que afectan a las mujeres y a impulsar políticas que proporcionen el apoyo necesario para que las mujeres sigan trabajando. Eso no sólo es bueno para las mujeres, sino también para los empleadores", dijo Christy Hoffman, Secretaria General del sindicato UNI Global .

Descargue el material de la campaña de UNI Apoyando la salud de las mujeres aquí.