Los cuidadores húngaros se unen para formar un nuevo sindicato y exigir salarios justos y respeto

En medio de crecientes desafíos, se ha creado un nuevo sindicato húngaro de cuidadores, SZÁD, que marca un cambio fundamental en la defensa de los derechos de los cuidadores en Hungría. Este avance se produce en un momento en el que los profesionales de la asistencia de toda Hungría, a menudo ignorados e infravalorados, se movilizan para exigir salarios justos y mejores condiciones de trabajo.

"Nos hemos sindicado porque nos hemos dado cuenta de que tenemos que permanecer unidos y avanzar juntos para lograr un cambio real", declaró Hajnalka Kanyó, secretaria de la nueva sección de SZÁD en Balassagyarmat.. El centro de asistencia social de esta ciudad del norte de Hungría se ha convertido en un centro neurálgico de las actividades del sindicato, donde casi todos los 40 miembros de la plantilla, que prestan servicios vitales como asistencia a domicilio y atención psiquiátrica, han mostrado un firme apoyo desde la formación del sindicato a finales de marzo.

Los esfuerzos del sindicato ponen de relieve una tendencia nacional más amplia, en la que los cuidadores se unen para hacer frente a la crisis del coste de la vida y buscar el respeto que exigen sus funciones. "Organizarse nunca es fácil, pero estos nuevos miembros de SZÁD han hecho oír su voz colectiva", señaló Alan Sable, responsable del sector de cuidados del sindicato UNI Global . Describió la sección de Balassagyarmat como un faro de esperanza y un paso decisivo en la consolidación del sector, tanto para los empleados como para las personas a las que ayudan.

Apoyando estas iniciativas, el Centro de Organización de Europa Central (COZZ) de UNI está ayudando a los trabajadores de cuidados de larga duración en Hungría proporcionándoles formación, capacitación y organizando al personal. La estrategia de SZÁD incluye la creación de sindicatos locales en todos los centros de asistencia húngaros para mejorar las condiciones de trabajo y la calidad de la asistencia, con el objetivo de transformar estos puestos en fuentes de empleo decente.

Haciéndose eco del sentimiento de cambio proactivo, Kornélia Koplányi, Vicesecretaria del capítulosubrayó: "Hasta ahoraasta ahora sólo nos hemos quejado, ahora pasamos a la acción"." Esta declaración subraya la transición del sindicato de la frustración al compromiso activo, marcando el rumbo de una reforma sustancial en el sector de la asistencia.