Más de 100 sindicatos de los sectores público y privado paralizaron Sri Lanka el 28 de abril, al unir sus fuerzas por primera vez en una huelga general de un día en la que se pedía la dimisión del gobierno y la formación de una administración interina.

Los sindicatos exigen que el gobierno dimita en el plazo de una semana. En caso contrario, declararán una huelga indefinida a partir del 5 de mayo.

Los principales organizadores fueron los sindicatos que representan a los trabajadores de los sectores de la banca, la sanidad, los correos y las telecomunicaciones, el comercio, los ferrocarriles, los profesores y los servicios portuarios, las plantaciones, el agua y la electricidad. La huelga también fue apoyada por organizaciones de la sociedad civil. 

Todas las afiliadas de UNI, incluidos el Sindicato de Empleados Bancarios de Ceilán (CBEU), la Federación de Funcionarios Bancarios de Sri Lanka (FBOSL), el Sindicato Nacional de Trabajadores de Correos y Telecomunicaciones (NPTWU), el Sindicato de Servicios de Correos y Telecomunicaciones de Sri Lanka (SLPTSU), el Sindicato de Funcionarios de Correos y Telecomunicaciones (UPTO) y Media-Pro-Tech, reunieron a sus miembros para participar en una manifestación de huelga celebrada en Galle Face Green, un lugar emblemático frente a la Secretaría Presidencial.

El pintoresco lugar alberga ahora una aldea de protesta "GoHomeGota" que ha crecido en tamaño desde el 9 de abril. La gente se reúne allí pacíficamente todos los días para expresar su descontento con la mala gestión de la economía por parte del gobierno y la consiguiente crisis de la deuda y la grave interrupción de los servicios y suministros esenciales.

UNI Asia y el Pacífico se solidarizó con todas sus afiliadas que participaron en la huelga general y sigue vigilando activamente la situación y reitera su anterior llamamiento para que el gobierno responda a las demandas del pueblo.  

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