El gobierno dominicano inició, en un solo día, una ola de despidos y cancelaciones masivas a más de 22 mil trabajadorxs del Ministerio de Educación. Esta medida afecta también al Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia, (INAIPI), en donde hay actualmente 2,000 trabajadorxs que son afiliadxs a SINATRASALUD, sindicato afiliado a la Federación de las Mujeres Trabajadoras, FENAMUTRA.
Las consecuencias son muy graves: miles de trabajadorxs se quedarán sin sustento económico junto con el impacto social que esto traerá, ya que son muchas las familias que dependen en gran medida de la atención brindada por este Instituto.
“Para la Federación de las Mujeres Trabajadoras es una obligación apoyar a todos los sectores que están siendo lacerados con los despidos masivos injustificados. Para nuestra organización es altamente preocupante ya que no sabemos si el presidente de la República tiene conocimiento de tantas desconsideraciones que se están haciendo”, expresó Ruth Díaz, presidenta de la Federación de las Mujeres Trabajadoras.
“Hacemos un llamado al señor presidente para que pueda sentarse a dialogar y, entre todxs, encontrar una salida a esta crisis que está afectando a tantos hogares dominicanos”, concluyó
Anteriormente lxs trabajadorxs del INAIPI eran trabajadorxs del Instituto Dominicano del Seguro Social, el cual fue disuelto en noviembre del 2019. Luego fueron transferidxs al Ministerio de Educación y hoy, en plena pandemia, vuelven a quedar en manos de la incertidumbre.
“Según la normativa del Código Laboral no se puede despedir en plena pandemia”, indicó Belkys Moscoso Jiménez. “Soy empleada directa y mi lucha es por lxs trabajadorxs, para que cesen los abusos y los maltratos en el régimen laboral. El derecho a la niñez no puede ser politizado”, concluyó.
UNI Américas envió una comunicación al presidente solicitando suspender de inmediato estos despidos masivos junto con el llamado al gobierno para que fomente el diálogo junto a lxs representantxs de lxs trabajadorxs del sector para encontrar una solución.
“A punto de cerrar un año que ha demostrado la labor esencial de lxs trabajadorxs de primera línea, entendemos que esta medida representa una gran falta de sensibilidad hacia este sector, así como también hacia la población que hoy más que nunca necesita respuestas y protección de su gobierno durante esta crisis sanitaria”, expresó Marcio Monzane, secretario regional de UNI Américas.
UNI y sus afiliadas expresan su solidaridad a la Federación Nacional de Mujeres Trabajadoras y SINTRASALUD en República Dominicana, en la defensa de los puestos de trabajo, de la vida y por su compromiso hacia la ciudadanía durante esta crisis sanitaria.
