La semana pasada en el Foro Económico Mundial de Davos, Christy Hoffman, Secretaria General de UNI Global Union, junto con otros ocho dirigentes sindicales, transmitió el mensaje de que los sindicatos siguen siendo eficaces y fuertes.
El tema de la reunión fue Globalización 4.0. y el mensaje principal de UNI fue que la Globalización 4.0 debe ser alcanzada con un contrato social redinamizado, o “Contrato Social 4.0”, para que se convierta en un éxito para los trabajadores y la democracia. Davos coincidió con la publicación del informe de la Comisión de la OIT sobre el Futuro del Trabajo que también pedía un contrato social redinamizado para abordar las cuestiones del nuevo mundo del trabajo.
Para los sindicatos, los elementos fundamentales del contrato social incluyen un salario digno y la protección social para todos, la garantía laboral universal de los derechos fundamentales para todos los trabajadores, independientemente de la forma de trabajo, el derecho a la formación permanente, el fortalecimiento de la negociación colectiva y la responsabilidad de las empresas.
En su informe anual de riesgos, el FEM pone de relieve el riesgo de que las instituciones multilaterales mundiales se vean amenazadas por los gobiernos nacionalistas y populistas que se han afianzado en Europa y Estados Unidos, y esta preocupación se reiteró en muchas sesiones. Pero como C. Hoffman respondió a Richard Quest en CNN “Mientras la participación de los trabajadores en la riqueza siga disminuyendo, todas nuestras instituciones democráticas estarán amenazadas”.
C. Hoffman dijo a Larry Elliott del Guardian , que “los trabajadores piensan que la globalización es para la élite, que Davos es para la élite. Si queremos una economía globalizada, no puede ser únicamente para las empresas.”
Durante los últimos años, un tema clave en Davos ha sido el aumento de la desigualdad. Este año no ha sido diferente. C. Hoffman dijo en la entrevista con The Guardian, que a pesar de todas las palabras cordiales había pocos signos de acción, “No hay sentido de sacrificio. Tiene que haber una transferencia de riqueza de un grupo de bolsillos a otro”. Como ha destacado C. Hoffman, no hay manera de disminuir la desigualdad sin una negociación colectiva fuerte combinada con políticas nuevas para gravar la riqueza. En una entrevista con la revista Der Spiegel, Hoffman dijo, “Vemos que la digitalización está impulsando la riqueza a gente como Jeff Bezos, el fundador de Amazon, a niveles enormes, mientras que en 2017 no ha habido crecimiento salarial en Europa occidental en términos reales”.
En sus entrevistas con los medios de comunicación en Davos, C. Hoffman puso de relieve el importante papel de la negociación para garantizar una transición justa al nuevo mundo del trabajo: “Podemos negociar sobre la aplicación de las nuevas tecnologías, sobre la programación poco realista acelerada por la tecnología digital, sobre la vigilancia excesiva y muchos otros temas. Si los trabajadores no tienen voz, se resistirán a esta tecnología. No tememos a las nuevas tecnologías, pero deben aplicarse en un entorno de seguridad y de imparcialidad. La negociación es fundamental en esta combinación”.
Otro de los temas principales en Davos fue el de la actualización de las competencias. En todos los sectores, los CEO expresaron su compromiso de actualizar las competencias de su plantilla actual en materia de tecnologías digitales. Se percibe un optimismo generalizado de que los empleos no desaparecerán en el futuro, sino que se producirá un aumento neto del número de empleos creados. A la vez, se reconocía que en esta transición algunos trabajadores serán desbancados. Para que estos trabajadores tengan una transición justa hacia un nuevo tipo de ocupación, los gobiernos tendrán que dar un paso adelante, idealmente a través de nuevos sistemas tripartitos, dijo C. Hoffman durante uno de sus debates en Davos, en el que también estaba presente Guy Ryder, Director General de la OIT.
Sharan Burrow, Secretaria General de la CSI, resumió la experiencia de Davos para el grupo de dirigentes sindicales cuando tuiteó que la comunidad empresarial estaba dividida en dos bandos, por un lado, los que quieren colaborar con los sindicatos para cambiar las reglas del juego con el objetivo de salvar el planeta y reducir la desigualdad mediante un nuevo contrato social y, por otro lado, los que se limitan a preocuparse por los beneficios y no por las personas. C. Hoffman reiteró la intención de UNI de seguir trabajando con aquellas empresas que demuestren responsabilidad hacia sus empleados, tales como UNI Credit con quien UNI ha firmado un acuerdo global la semana pasada, y pedir cuentas a aquellas, como Amazon, que no lo hacen.
Para más cobertura de los medios de comunicación con la Secretaria General de UNI GS ver aquí: https://rlsd.co/p/l_FBOQ
