La 22da Reunión del Comité Ejecutivo de UNI Américas abrió la sesión pidiendo un minuto de silencio por dos líderes sindicales que han fallecido recientemente y que han dejado un gran legado en sus organizaciones, afiliadas a UNI: Héctor Figueroa, de SEIU, y Morton Bahr, de CWA.
Héctor Daer, presidente de UNI Américas, dio la bienvenida a los miembros del Comité y planteó la coyuntura política actual que está viviendo la región, mencionando la crisis en el Amazonas y las elecciones que se aproximan en algunos países. Como consecuencia de esta crisis medioambiental, el Comité aprobó una moción en repudio a la deforestación y a los incendios criminales efectuados por el gobierno brasileño. Asimismo, aprobó otra moción en apoyo al Paro General Parcial que está llevando a cabo el PIT-CNT en Uruguay en el día de hoy, por la continuidad de la negociación colectiva, la vigencia de los Consejos de Salarios y en defensa políticas públicas.
Alke Boessiger, secretaria general adjunta de UNI Global Union, expresó que UNI sigue luchando y denunciando los atropellos a los derechos humanos en las Américas y en todo el mundo, como el llamado al gobierno de Hong Kong a que proteja el derecho a la libre asociación, la libertad de expresión y otros derechos democráticos, y el compromiso de UNI de seguir presionando a nivel global la liberación de Lula, cuando se están cumpliendo 500 días en prisión. De igual forma, reforzó el triunfo al aprobarse el Convenio 190 sobre la eliminación de la violencia y el acoso en el mundo del trabajo, haciendo un llamado a las afiliadas.
“Este ha sido un paso muy importe, pero el siguiente paso es la ratificación. Debemos presionar a los gobiernos para que adopten el Convenio, tenemos un gran trabajo por delante”, manifestó.
Las y los líderes sindicales debatieron sobre el escenario político, social y económico particular de cada uno de sus países a raíz de las reformas laborales y de jubilaciones que se están implementando en muchos de ellos, cómo impacta la crisis migratoria venezolana, la precarización del trabajo que las empresas impulsan justificándose en los avances tecnológicos, o las elecciones que se aproximan que ponen en jaque los derechos conquistados y representan un ataque directo a las organizaciones sindicales. A pesar de la situación actual y de la presencia de gobiernos neoliberales en algunos países, el movimiento sindical está dando su lucha para revertir la situación para no tener más Bolsonaros o Trumps en ningún otro país.
Marcio Monzane, secretario regional de UNI Américas, señaló que la coyuntura actual es compleja pero hizo un llamado a seguir trabajando juntxs. “Reforzamos la necesidad de profundizar nuestro plan de trabajo y reafirmamos también que con todo nuestro esfuerzo podremos enfrentar el momento complejo de la región”, concluyó.
