UNI Américas y sus afiliadas comenzaron una campaña en respaldo a lxs compañerxs del Sindicato Nacional de Empleados del CrediScotia Financiera – SINECREDISCOTIA, en rechazo al anuncio de despido masivo de aproximadamente 350 trabajadorxs de CrediScotia Financiera S.A. Entre estos despidos se encuentran todos los miembros de la Junta Directiva del sindicato, más de la mitad de los miembros del sindicato (106 afiliados), la compañera Patricia Salazar, secretaria general del sindicato y vice presidenta mundial de UNI Finanzas, y su secretario general adjunto, Miguel Portugués.
“El Comité Ejecutivo de UNI Américas Finanzas declaró repulsiva la conducta de esta empresa propiedad de Scotiabank que de manera insensible e inhumana arroja a la calle a sus trabajadorxs en plena pandemia y los deja sin sindicato””, expresó Guillermo Maffeo, director regional de UNI Américas Finanzas. “El sindicalismo global rechaza y repudia la conducta antilaboral de Crediscotia Perú. Bajo ningún concepto vamos a permitir la desapareción del sindicato con estas medidas que sin lugar a dudas son antinsindicales”. Con estas medidas anunciadas, la empresa está vulnerando el derecho al Trabajo y a la Libertad Sindical que, en medio de una situación de grave crisis sanitaria, priva de su fuente de ingresos a lxs trabajadorxs y sus familias, y tiene como consecuencia la grave afectación de la continuidad del sindicato.
Asimismo, esta medida no se condice con las elevadas ganancias netas que en los últimos años han mantenido tanto CrediScotia Financiera S.A. como el Grupo Scotiabank. Esta transnacional financiera canadiense se ha consolidado como la tercera entidad financiera más importante del sistema financiero peruano y es parte fundamental de uno de los grupos empresariales más importantes del país. Es decir que, desde que surgió en el mercado peruano, CrediScotia Financiera S.A es protagonista del éxito del Grupo Scotiabank siendo lxs trabajadorxs pilares del desarrollo de este conglomerado empresarial.
UNI Américas y sus afiliadas han hecho un llamado a la empresa para que pueda enmendar su conducta, respete los derechos sindicales de lxs trabajadorxs y se abstenga de implementar este despido masivo, dando muestra que valora, ante todo, la condición humana y el bienestar de lxs trabajadorxs y sus familias.