Para la Jornada Mundial por el Trabajo Decente del 7 de octubre, UNI Global Union inaugura una campaña internacional para exigir derechos esenciales para los trabajadores y trabajadoras esenciales.
Durante la pandemia de COVID-19, trabajadores mal remunerados, subestimados e infravalorados han logrado que sus comunidades sigan funcionando. Estos trabajadores garantizan que haya alimentos en las estanterías, cuidan de los enfermos y los ancianos, y se aseguran de que nuestras escuelas, lugares de trabajo, transportes públicos y espacios públicos sean seguros y estén limpios. También entregan correo y paquetes y proporcionan el acceso necesario a servicios financieros.
“El trabajo decente para los trabajadores esenciales implica mejor remuneración, empleos seguros, bajas por enfermedad remuneradas, representación sindical y respeto”, dice Christy Hoffman, secretaria general de UNI Global Union. “Cualquier economía justa después de la pandemia debe revaluar radicalmente este trabajo esencial. Tanto en periodos de crisis como de calma, estos trabajadores contribuyen muchísimo y merecen más que aplausos y palabras amables”.
Del mismo modo que la crisis ha puesto de manifiesto cuán indispensables son estos trabajos, nuestras sociedades no pueden seguir ignorando las necesidades de las personas que los desempeñan. La Jornada Mundial por el Trabajo decente brinda la oportunidad de llamar la atención sobre los cambios fundamentales necesarios en nuestra economía mundial.
Sindicatos de todo el mundo están luchando para exigir derechos esenciales para todos los trabajadores esenciales:
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Un salario digno. Si el trabajo es lo suficientemente esencial como para que el trabajador se arriesgue a exponerse a un virus letal, al menos debería recibir un salario vital.
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Seguridad en el lugar de trabajo. Los trabajadores deberían tener acceso a equipos de protección individual, poder mantener el distanciamiento social y aplicar otras medidas de seguridad necesarias.
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Baja por enfermedad remunerada. La baja por enfermedad remunerada garantizada es fundamental para proteger a los trabajadores y frenar la propagación del virus.
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Negociación colectiva y representación sindical. Los trabajadores esenciales, durante la crisis y más allá, deberían disfrutar de las condiciones y protecciones obtenidas a través de la negociación colectiva.
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Condiciones especiales durante una crisis. Los trabajadores esenciales deberían tener acceso a prestaciones adicionales, entre ellas: cuidado infantil de emergencia, complemento de peligrosidad, protección y formación especiales en materia de seguridad en el trabajo, acceso a pruebas y transporte seguro.
“A lo largo de la pandemia, nos sentimos más orgullosas y valientes. Nos sentimos como leonas porque nos resistimos a la enfermedad. Nuestros vecinos nos han considerado como heroínas. Hemos estado en el frente de esta crisis y ahora merecemos más.” dijo Isabel Cortes, limpiador en Peru y miembro de Sitobur.
“Los trabajadores y trabajadoras de los supermercados merecen mejores condiciones de trabajo, incluyendo un salario justo y un lugar seguro donde trabajar.” dijo Abdel Ben Touhami, trabajador de un supermercado Lidl, FNV, Países Bajos.
“Como trabajadores esenciales no deberíamos tener que hacer campaña para poder acceder a un EPP adecuado, pero ahora, por último, no es necesario.” dijo Tessa Clement, trabajadora de cuidados domiciliarios, Public Services Association, Nueva Zelanda
El valor de estos derechos durante la crisis provocada por el coronavirus está claro. Un salario de base más elevado y condiciones especiales durante una crisis implican que los trabajadores tienen más probabilidades de tener solo un trabajo y proteger la salud de todos los miembros de su hogar y, de este modo, reducir el riesgo de infección. Los trabajadores que puedan permitirse tomarse la baja por enfermedad no se verán obligados a acudir al trabajo enfermos y poner en riesgo a sus compañeros. Las normas de seguridad en el trabajo pueden frenar la propagación de una enfermedad contagiosa. La negociación colectiva y la representación sindical garantizan a los trabajadores el poder para proteger estos derechos en el trabajo.
