La seguridad en las fábricas de ropa es una prioridad en Pakistán

En el décimo aniversario del terrible incendio de la fábrica de confección Ali Enterprises en Pakistán, el sindicato UNI Global , IndustriALL Global Union y las marcas firmantes del Acuerdo Internacional se unen en su compromiso de poner en marcha un programa de seguridad para los trabajadores del país lo antes posible.

Más de 250 trabajadores de la confección murieron y más de 50 resultaron gravemente heridos cuando la fábrica Ali Enterprises de Karachi estalló en llamas. Desde aquel mortífero día del 11 de septiembre de 2012, se ha producido un catálogo de incidentes mortales en la industria textil y de la confección en Pakistán.

Por esta razón, el Acuerdo Internacional para la Salud y la Seguridad en la Industria Textil y de la Confección, que es una colaboración entre los sindicatos mundiales y las marcas, ha identificado a Pakistán como un país prioritario en el que ampliar su programa de seguridad de los trabajadores, innovador y legalmente vinculante. El Acuerdo de Bangladesh sobre seguridad en materia de incendios y construcción transformó la seguridad de las fábricas de ropa en Bangladesh desde el desastre de Rana Plaza en 2013, y el Acuerdo Internacional sigue manteniendo la seguridad de los trabajadores allí.

La Secretaria General Adjunta de UNI, Alke Boessiger, que es una negociadora clave del Acuerdo Internacional para establecer un programa de seguridad en Pakistán, dijo:

"Tanto UNI como IndustriALL llevan meses trabajando conjuntamente con las marcas y las principales partes interesadas en Pakistán para desarrollar un programa de seguridad de los trabajadores en la industria textil y de la confección. Estamos ultimando los detalles para establecer este programa y esperamos comenzarlo muy pronto.

"Mientras recordamos y lloramos a los que perecieron en el devastador incendio de Ali Enterprises hace diez años, exigimos un futuro seguro para todos los trabajadores del sector textil y de la confección en Pakistán."

Fotografía: la fábrica de Ali Enterprises en Pakistán tras el incendio del 11 de septiembre de 2012.