Según un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (ILO), la eliminación de las antiguas deficiencias en los servicios de asistencia podría crear casi 300 millones de puestos de trabajo de aquí a 2035. La ampliación del acceso universal a los cuidados también supondría un enorme avance hacia la igualdad de género.

El informe, Cuidados en el trabajo: Invertir en permisos y servicios de cuidados para un mundo laboral más igualitarioofrece una visión global de las leyes, políticas y prácticas nacionales en materia de cuidados, incluyendo la maternidad, la paternidad, los padres, los niños y los cuidados de larga duración. El informe aboga por un cambio transformador en el sistema mundial de cuidados.

Por ejemplo, en Europa, más de 76 millones de personas, es decir, casi el 13% de la población del continente, cuidan de sus familiares o amigos renunciando a su tiempo de trabajo o de ocio, y la necesidad de cuidados -sobre todo para apoyar a las personas mayores y a las discapacitadas- ha aumentado considerablemente debido al aumento de la esperanza de vida y al impacto de la pandemia del COVID-19.

Sin embargo, el estudio constata que el acceso a servicios como la atención residencial, los servicios comunitarios de día y la atención a domicilio, sigue siendo inaccesible para la gran mayoría de quienes los necesitan en todo el mundo, aunque "los servicios de atención de larga duración son esenciales para garantizar el derecho a un envejecimiento saludable y digno". A nivel mundial, el 84,2% de la población total vive en países donde los servicios de larga duración no son universales y gratuitos, lo que afecta a 205 millones de personas mayores.

La carga de llenar estos "vacíos de cuidados" para los ancianos, los discapacitados y los niños recae desproporcionadamente en las mujeres, creando una crisis de cuidados que empuja a muchas mujeres a abandonar la fuerza laboral o a no entrar en ella. Hace dos años se invirtió el aumento de empleo que las mujeres obtuvieron en Estados Unidos desde la crisis financiera mundial de 2008. En América Latina se registró un retroceso de 18 años para las mujeres. 

"Una mayor inversión en servicios de cuidados contribuye a la igualdad de género al proporcionar a las mujeres trabajadoras apoyo en sus responsabilidades de cuidado. También crea oportunidades de empleo adicionales para las mujeres. Aproximadamente el 90% de la mano de obra de los cuidados de larga duración son mujeres. Además, los hombres se benefician de los cuidados", dijo Adrian Durtschi, Jefe del sector de cuidados de UNI. "Sin embargo, debemos asegurarnos de que los empleos que creamos en el sector de los cuidados sean buenos empleos con condiciones seguras, derechos sindicales y salarios dignos".

El sitio web ILO calcula que una reinversión global en cuidados crearía 96 millones de empleos directos en el cuidado de niños, 136 millones de empleos directos en cuidados de larga duración y 67 millones de empleos indirectos en sectores no relacionados con los cuidados.

"Colmar estas lagunas en materia de atención debe considerarse una inversión que no sólo apoya la salud y los medios de vida, sino también los derechos fundamentales, la equidad de género y una mayor representación", dijo Manuela Tomei, Directora del Departamento de Condiciones de Trabajo e Igualdad de ILO .